miércoles, 14 de marzo de 2018

En la piel del lobo (epidermis)



Eras fauna extraña.
Y yo nunca había tenido antes
la oportunidad de mirarle a
los ojos al lobo tan de
cerca. Ahora veo todo claro,
me atrajo la idea
del experimento.

El aura del conformismo
me ha subyugado las
extrañas, muy lentamente,
hasta que, por fin, me he
dado cuenta del destrozo,
que hoy, anida en mí.

De sobra es consabido que
cada lobo tiene su pelaje.
El tuyo era muy negro,
como la guerra
y sus lanzas.
Como el agua que
corre por el barranco, y que
hoy, inunda en mí.

Ahora, desollada, ya no queda
nada que rascar.
Dermis reseca por la carencia del agua,
por la falta de guerra,
por la falta de mí.

Hoy, ni habito ni anido.
Ni vencedores, ni vencidos.
Solo esta nada
que me duele.



(Perspectiva histórica II)


No hay comentarios:

Publicar un comentario